El almohada de espuma de memoria rallada De hecho, puede deformarse lentamente de acuerdo con la presión y la temperatura de la cabeza y el cuello para que se ajuste al contorno. Esto se debe a las propiedades únicas del material de las espumas de memoria, que pueden responder a la presión externa y los cambios de temperatura, cambiando gradualmente de forma en el área de contacto, proporcionando experiencia de soporte personalizada.
La espuma de memoria (incluida la espuma de memoria triturada) es un material con "termoplasticidad", lo que significa que puede suavizarse o endurecerse de acuerdo con los cambios en la temperatura. Cuando su cabeza y cuello entran en contacto con la almohada, la espuma de memoria se calentará y se volverá más suave, adaptándose a la curva y la forma de su cuello. Específicamente, cuando te acuestas hacia abajo, la superficie de la almohada primero siente presión de tu cabeza y cuello. En este punto, la estructura molecular de la espuma se deformará gradualmente y dará forma lentamente a lo largo de los contornos de la cabeza y el cuello. Con el tiempo, la espuma de memoria se adherirá completamente a su cabeza y cuello, proporcionando un soporte más preciso y reduciendo los puntos de presión causados por un soporte desigual.
La característica especial de una espuma de memoria triturada es que se compone de múltiples pequeñas piezas de espuma, que tienen una mejor flexibilidad y adaptabilidad que las espuma de memoria grande tradicional. Debido a las más brechas entre los pequeños fragmentos, pueden responder con mayor precisión a la presión y la temperatura de la cabeza y el cuello, proporcionando una experiencia de apoyo más uniforme y personalizada. Cuando cambia su posición o postura para dormir, estos fragmentos pueden ajustar rápidamente su forma y volver a su estado original para adaptarse a la nueva distribución de presión. Esto hace que la almohada de espuma de memoria rallada sea más elástica y adaptable que las almohadas de espuma de memoria de bloque completo tradicionales.
La temperatura también es un factor importante que afecta la deformación de las espumas de memoria. A temperaturas más altas, las espumas de memoria se vuelven más suaves y las almohadas son más fáciles de adaptarse a los contornos de la cabeza y el cuello, mientras que a temperaturas más bajas, la espuma se vuelve ligeramente más dura. Este lento proceso de deformación no solo depende de la presión, sino que también está influenciado por los cambios de temperatura, lo que ayuda a proporcionar apoyo personalizado bajo diferentes posiciones de sueño.









